D. TADEO..

Echar mis cuentas.

Necesito

Primero

Tengo que ganar á muchos :-
Dar siquiera unos mil pesos
Á la interesada (y gracias
Si desiste de su empeño;:
Por que ella, al fin, va á perder
Una boda de provecho.).
Luego, por lo que á mí tóca,
Á arbitrio de usted lo dexo:;
Que con las gentes de honor
No ajusto ni regatéo..on La

D. DOMINGACRY

¿Bastarán.... dos mil ducados C

Para todo?

.D. TADÉOLÍ MOJ

Ménos, ménos:

Si llega á veinte mil reales....

FELIPA. ".I

Pues nó, no es ningun exceso.

D. DOMINGA,)

Toma esta llave, Felipa cis

En la gabeta de enmedio...

FELIPA e'??

Sí.no es un bolsillo grande?...ops A

No hai otro.

D. DOMINGA.

FELIPA.

Al instante vuelvo.

[Vase.]

D. DOMINGA..

No daré los veinte mil,

Por que en la hora no puedo:
Algo mas de la mitad

Entregaré desde luego.

D. TADEO.

Yo supliré lo que falte.

No quedemos mal por eso ;
Que no nos vamos del mundo....

Pero, por Dios, el secreto.

FELIPA.

que sale corriendo con un bolsillo en la

mano.]:

Aquí está.

D. DOMINGA.

Señor Notario, on,

Son doblones de oro nuevos;

ર

Hai unos ciento y sesenta.

D. TADEO.

Ciento у sesenta? Ajustemos. Hacen.... Dexe usted.... Cabales.

Sí: doce mil y ochocientos;`

[Mientras escribe, va diciendo mui pausa

damente.]

Pero ahora bien, Señora:

Somos mortales; y quiero
Dexar á usted mi recibo
Mientras vuelvo por el resto.
Usted descuide.- El papel

Es éste.

FELIPA.

¡Qué ganas tengo

De hacerle dos mil añicos!

Y al Alquimista embustero
Que le escribió.... bailaría
Sobre su alma un taconéo.

[D. Dominga, despues de guardar el papel de casamiento que la entrega D. Tadéo, mira la firma del recibo que él ha dexado sobre la mesa.]

a
D. DOMINGA.

Jesus! qué nombre tan raro!

D. TADEO.

Así me llamo : Roberto

Urreguezurrescoá.

FELIPA.

¿Urre-zurra qué? No aprendo

Este apellido en veinte años.

D. TADEO.

Vivo en la calle del Perro
Para lo que usted me mande.
Otro dia nos verémos;
Y bien puede usted decir
Que la saco de un aprieto
Mas que mediano.

D. DOMINGA.

Es verdad;

Y á fé que se lo agradezco.

D. TADEO.

¡Lo que pueden una Dama
Liberal, y un hombre experto!
Ella en estos lances pone
La pecunia, y él su ingenio. —

Agur.

FELIPA.

Vaya usted con Dios.

Nos ha vuelto el alma al cuerpo.

a
D. DOMINGA.

El Hijo de mis entrañas!

Aunque venda mi aderezo.

[Vase.]

ESCENA XII.

D. DOMINGA, FELIPA, D. ALFONSO y D.3

FLORA.

D. DOMINGA.

Señor Don Alfonso!.... Flora!....

Ya empiezo á tener consuelo.

Ya Mónica no podrá
Poner un impedimento.
Por la mas rara fortuna,

D. ALFONSO.

-Me alegro.

Pero pudiendo probarse

El engaño manifiesto
Con que le hicieron firmar

La obligacion....

a

D. DOMINGA.

Un tropiezo

¿Quien no le tiene? Está nadie Libre de un mal pensamiento?

D. ALFONSO.

Confieso á usted que, si en algo