V. 3 y 4. Horná fruge... De la cosecha del año, de trigo nuevo, como he traducido. V. 7. Dulces alumni... La tierna prole de los ganados, la cria del año. V. 8. Pomifero... Hermoso epiteto, que ó era menester adoptar, como yo he hecho, ó emplear un rodeo para espresar la idea que envuelve. El grave tempus alude á la insalubridad de la estacion en muchas partes de la Italia, y principalmente en las inmediaciones de Roma. Obsérvese con qué maestría están indicados en un solo verso, y en solo dos epitetos, los peligros y los goces del otoño. Dos adjetivos pintorescos designan la estacion de las frutas y la de las tercianas. V. 9. Algido... Véase la nota al verso sesto de la oda veinte y una del libro primero. V. 11. Albanis in herbis... La ciudad de Alba, fundada tres siglos antes que Roma, tenia pingües prados en las inmediaciones del lago del mismo nombre. El monte que dominaba la ciudad se llama todavia hoy monte-Albano. V. 13. Te nihil attinet... La construccion es, te coronantem parvos Deos rore marino, nihil attinet illos ODE XXIV. IN AVAROS. Intactis opulentior Thesauris Arabum et divitis Indiæ, Cæmentis licèt occupes Tyrrhenum omne tuis et mare Apulicum: Si figit adamantinos Summis verticibus dira Necessitas tentare multa cæde bidentium, id est, mactando multas bidentes. Parvos Deos (los Lares) están aqui en oposi cion con los dioses del Olimpo, en cuyo honor hacian los pontífices los grandes sacrificios de que antes se ha hablado. V. 17. Immunis... A culpá. V. 17. Non sumptuosa... Sumptuosa hostia no es un ablativo, como lo creyeron muchos comentadores, sino un nominativo. La construccion es, sumptuosa hostia non mollibit aversos Penates blandior, id est blandiùs, farre pio. V. 19. Mollibit... Por molliet, arcaismo. Otros leen mollivit. Aversos Penates... Los Penates son los parvos Deos de arriba, pues ya he dicho en otra ocasion, que los dioses domésticos se llamaban indistintamente Lares y Penates. La calificacion de aversos que les dá el poeta es hipotética, y el sentido de la frase es, « aunque estuvieran irritados tus Penates contigo, no los desagraviarias mejor con grandes sacrificios, que con un puñado de cebada y de sal; » es decir, con los hornazos groseros que hacen los labradores pobres. ODA XXIV. CONTRA LOS AVAROS. Aunque mas rico fueras Que el árabe y el indio no domados, Y el tusco mar cubrieras, Y el de Pulla de alcázares dorados; Si la Necesidad fija arrogante En tu elevado techo Sus clavos de diamante, TOMO II. 12 Clavos, non animum metu, Non mortis laqueis expedies caput. Campestres meliùs Scythæ, Quorum plaustra vagas rite trahunt domos, 10 Vivunt, et rigidi Getæ ; Immetata quibus jugera liberas Fruges et Cererem ferunt; Nec cultura placet longior annuâ, Defunctumque laboribus Æquali recreat sorte vicarius. Illic matre carentibus Privignis mulier temperat innocens; Nec dotata regit virum 15 Conjux, nec nitido fidit adultero. 20 Dos est magna parentium Virtus, et metuens alterius viri Certo fœdere castitas; Et peccare nefas, aut pretium est mori. O! Quisquis volet impias Cædes, et rabiem tollere civicam; Si quæret pater urbium Subscribi statuis, indomitam audeat Refrenare licentiam, 25 Clarus post genitis; quatenus, heu nefas! 30 Virtutem incolumem odimus, No de zozobras librarás tu pecho, Ni eximiráse fuerte Tu cuerpo de los lazos de la muerte. Siempre arrastrando en mísera carreta Vive mejor y el aterido geta. Dánles campos comunes mies segura, Dó libran su sustento. A un año la cultura Limita cada cual, y al fin contento Que tambien á su vez á otro la deja. Madrastra pía al huérfano querido ; Fiada en el galan, manda al marido. La heredada virtud, el pudor blando Que, al suyo idolatrando, De todo otro varon huye medrosa ; Ni impune se pervierte, Que á la infidelidad sigue la muerte. ¡ Ah! si alguno aun el grito De atroz discordia sofocar desea, Y que su nombre inscrito, Cual de padre del pueblo, en bronces sea, Ataque osado la licencia impía, Y otras generaciones Bendeciránle un dia; Sublatam ex oculis quærimus invidi. Quid tristes querimoniæ, Si non supplicio culpa reciditur? Quid leges sine moribus Vanæ proficiunt, si neque fervidis Pars inclusa caloribus Mundi, nec Boreæ finitimum latus, Duratæque solo nives Mercatorem abigunt; horrida callidi Vincunt æquora navitæ? Magnum pauperies opprobrium, jubet Quidvis et facere et pati, Virtutisque viam deserit arduæ. Vel nos in Capitolium, Quò clamor vocat et turba faventium, Vel nos in mare proximum Gemmas et lapides, aurum et inutile, Summi materiam mali, Mittamus. Scelerum si bene pœnitet, Eradenda cupidinis Pravi sunt elementa, et teneræ nimis Mentes asperioribus Formandæ studiis. Nescit equo rudis Hærere ingenuus puer, 35 40 45 50 55 |