Su airada faz volviendo hácia otro lado? ¡Qué este, dicen, que un hora Y la Apia via cubren sus bridones, Despreciando las leyes insolente! ¿A qué equipar tan poderosa armada Si debe por tal gefe ser mandada ? sido azotado por el verdugo; y esta censura podia ofender al triunviro, que sin tomar en cuenta tales antecedentes, le habia dado tan señalada muestra de benevolencia y de confianza. Por lo demas, no se está de acuerdo sobre quién era este Mena, cuyo nombre no aparece en la composicion, sino solo en el epígrafe con que la encabezaron los manuscritos. Fuese él, sin embargo, quien fuese, no se dejará de convenir en que era peligroso esplicarse con tanta violencia contra un hombre, á quien por afecto ó por política, conservaba á su servicio el poderoso Octavio. V. 1. Sortito... Id est, sorte naturæ, ó naturali fatorum necessitate, como esplicaron los intérpretes. V. 3. Ibericis funibus... Parece que las pencas con que se azotaban á los esclavos se hacian de esparto, planta que como todos saben, abunda mucho en España. V. 7. Sacram viam... La via sacra, ó calle sagrada, era uno de los puntos de reunion de los ociosos de Roma. V. 8. Bis ter... Esto es, muy ancha y muy larga, como la gastaban los ricos. Bentlei y Cuningam leyeron bis trium, pretendiendo que bis ter es un solecismo. ¿Quién hubiera dicho á Horacio que la Inglaterra, tan bárbara y feroz en su tiempo, habia de producir 1700 años despues de su muerte, hombres que no creyendo latinas mas frases que las que nos han quedado en las obras de los escritores romanos, que han sobrevivido á las inundaciones de los bárbaros y á los desastres de la edad media, calificase de solecismo una espresion, porque ellos no habian visto otra semejante ? Y ¿qué pensar de otro comen. tador que, como para justificar aquella decision, dice, << no se perdonaria esta frase á un estudiante ? » Como si por una parte Horacio no mereciese mas respeto que un escolar, y como si por otra profesores ignorantes no reprendiesen muy amenudo en sus discípulos cosas, que no solo no debian desaprobar, sino que debian aprender. V. 11. Triumviralibus.. Los Triunviros llamados capitales, eran unos empleados de justicia, que conocian sobre todo de los delitos de la canalla, y asistian al suplicio de los reos. El poeta suponiendo antes azotado á Mena por orden de su amo, y despues por mandado de la justicia, le cubre de toda la ignominia que en aquella época era posible derramar sobre un hombre. V. 12. Præconis... El pregonero iba al lado de los azotados, pregonando sus delitos. V. 14. Appiam... La célebre via Apia, construida en ODE V. IN CANIDIAM VENEFICAM. « At ò Deorum quidquid in cœlo regit 441, está aqui designada en vez de otro cualquier camino, sin duda porque Mena debia andar una parte de ella para ir á sus haciendas de Falerno. V. 15. Sedilibus in primis... Habia en el circo catorce grandes bancos para el órden ecuestre. V. 16. Othone contempto... El tribuno Lucio Roscio Oton habia hecho la ley que señalaba a los caballeros los bancos de que he hablado en la nota anterior. Mena, hecho caballero, tenia derecho de sentarse en ellos; pero quizá el espíritu de esta ley se oponia á que hombres de condicion tan baja llegasen á aquel puesto distinguido, y esto es lo que hace decir al poeta, despreciando la ley de Oton. Esta esplicacion no satisfará acaso a algunos, pero yo puedo asegurarles que nada encontrarán mas satisfactorio en los intérpretes. V. 17 y 18. Ora rostrata... Æra rostrata propuso corregir Benlei, y rostra ærata Sanadon. Ora rostrata tiene á la verdad una esplicacion dificil, y los que interpretaron ora por rostra incurrieron en un pleonasmo ridículo. V. 19. Contra latrones... Sexto Pompeyo habia reunido un ejército y una escuadra, compuestos en la mayor parte de ladrones y asesinos. Para combatirlos, y hacer frente á otras atenciones de la guerra, Octavio armó tambien toda la gente baldia y soez que pudo allegar, y la censura dirigida contra la calidad de los que componian la hueste del temible disidente, era aplicable à la formada por orden del triunviro. Fácil es conocer que esta indicacion podia comprometer al poeta. ODA V. CONTRA LA HECHICERA CANIDIA. >>¡Ah! por los dioses, que del alto cielo » La tierra rigen y el linage humano, » ¿Qué ese estrépito insano 384 » Quid iste fert tumultus? aut quid omnium » Per liberos te, si vocata partubus » Per hoc inane purpuræ decus precor, » Quid ut noverca me intueris, aut uti Ut hæc trementi questus ore, constitit Impube corpus, quale posset impia Mollire Thracum pectora, 5 10 Canidia, brevibus implicata viperis 15 Crines et incomptum caput, Jubet sepulcris caprificos erutas, Jubet cupressus funebres, Et uncta turpis ova ranæ sanguine, Plumamque nocturnæ strigis, Herbasque, quas Iolcos atque Iberia Mittit, venenorum ferax, 20 Significa, decid? ¿por qué de todas » Sobre mí solo fijos » Los torvos ojos veo? > Por tus queridos hijos, » Si madre alguna vez, Canidia, fuiste : >> Por este trage triste, » Insignia noble de mi infancia tierna; Por la justicia eterna, ⚫ Que desaprueba crueldad tamaña, » ¿Por qué, por qué con saña » Me miras de madrastra endurecida, Trémulo el labio, un niño prorumpiera, Su blando cuerpo, que á piedad moviera Del tracio mas cruel el alma fiera. Y el cabello tendido Con víboras feroz Canidia anuda, Y á las mágicas llamas Lanzar manda sañuda De fúnebre ciprés gruesas ramas, De los sepulcros en las anchas grietas; De torpe sapo con la sangre inmunda, Y las yerbas que Yolcos, En ponzoñas fecunda, Cria y la Ibera tierra, TOMO II. 25 |